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| Fotógrafo: Tom Kleiner |
La religión conlleva una tendencia al fundamentalismo. Unas veces este fundamentalismo se mantiene escondido bajo una fuerte moderación de las "formas" como ocurre en el cristianismo. En este sentido los cristianos no se exaltan, ni utilizan el terror para imponer su religión, aunque no siempre fue así, recordemos la inquisición, lo hacen desde la Palabra. Intentando convencer al otro de que su Verdad es la única posible, todos los demás están confundidos. En numerosas ocasiones el culto y el rito se han convertido en ritos sociales a los que se debe asistir por "el qué dirán", y no se aprovechan para abrir la conciencia y profundizar en la espiritualidad. Las oraciones se recitan de forma mecánica sin ponerles una intención concreta ni profundizar en el poder divino que ellas integran.
Hablo del cristianismo porque es el que conozco más de cerca, en el que fui educada y a lo largo de mi vida, yo misma he pasado por diferentes estadios dentro de esa religión, hasta que un cura en la Basílica del Pilar de Zaragoza me dijo que yo era una hereje y que estaba fuera de la Iglesia católica porque soy casada por la iglesia, divorciada y vuelta a casar por lo civil. Ese día me dí cuenta que estaba en el camino correcto, que nadie podía decirme que puedo creer y que no. Ese hombre estaba utilizando su poder eclesiástico para crearme una mala conciencia sobre mi misma (pecadora) sin conocerme ni saber como me comporto en mi día a día, ni cual es mi labor en la sociedad. Y me estaba diciendo que yo no podía pedir nada a Dios porque la Institución consideraba que yo no era digna de hablar con Él. En realidad hubiese dado igual si yo me hubiese dedicado a atender a pobres y enfermos, por el solo hecho de mie estado civil, según la Iglesia Católica, yo estoy condenada y jamás recibiré la absolución. ¿No es esto una forma de fundamentalismo?
El fundamentalismo existe en todas las religiones y ninguno de ellos es bueno, pues en su núcleo todo fundamentalismo alberga intolerancia hacia el que no ve las cosas del mismo modo.
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| Fotógrafo: Kerer Peter |
La espiritualidad es un camino y no tiene reglas concretas, ni ritos estrictos. Las acciones que se observan en un ser espiritual o en busca de su interior, como la meditación, la oración, los retiros o recitar mantras, no son parte de un culto determinado, son "herramientas" que facilitan abrir cada vez un poco más la conciencia y profundizar en el interior. También nos revela nuestra unión a la energía universal, a lograr sentir el vínculo con el todo y con cada uno de los seres que nos rodean. Y nos ayuda a saber cual es nuestro lugar en este mundo, nuestro para que y como cada una de nuestras acciones afecta no solo a nuestro entorno inmediato sino a todos y cada unos de los habitantes del universo. El "Efecto Mariposa" no es una fantasía, realmente cada acción que realizamos se propaga de forma positiva o negativa por tod el universo y además finalmente regresa a nosotros de forma multiplicada con el mismo efecto positivo o negativo ocn el que comenzó.
La espiritualidad comienza ese día en el que te levantas, tu vida va bien, muy bien, mal o fatal, eso no importa, y te preguntas verdaderamente en serio: "¿Es esto todo o hay algo más?" Y te respondes convencido "Tiene que haber algo más" o también te puede surgir la pregunta ¿Que he venido yo a hacer aquí, cual es mi verdadera función, cual es mi destino? y sientes una necesidad imperiosa de encontrar la respuesta. En ese momento comienza el más fascinante de los caminos a la búsqueda del más preciado de los tesoros. Tu Ser.
Si estás en ese camino te envío mucha fuerza para que sigas paso a paso. Si aún no lo has comenzado, si te asaltan dudas, si te surgen miedos...no te preocupes es normal, todo cambio da vértigo. ¡Ánimo!
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Hola Silvia, lamento esa tan terrible experiencia con el cura ese, sabes que soy católico, y por lo que me conoces sabes un poco de mi espritualidad, no quiero comentar mucho de tu experiencia que te ha llevado a otro camino. Personalmente creo que el hereje es ese cura, y me da una pena enorme, y me duele en el corazón su falta de caridad, pero un pobre miserable como ese no puede ser motivo para estar reñida con la religión. La religión es unipersonal, los ritos están de más. Si al final el que más sufre en todo esto es Cristo, por tener mamarrachos semejantes hblando del evangelio (un evangelio acomodado, no el que habla de amor y caridad). Pero si a Ël lo crucificaron, ¿que puedes esperar que hagan con la gente buena como tú? En fin, es mi postura y respeto la tuya. Fíjate en Teresa de Calcuta, amó a todos por igual, fueran de la religión que fueran, seguro que el del Pilar no ha tocado un pobre en su vida, bueno si, se toca a si mismo todos los días. Que tristeza por él. Que tu estés feliz es lo que importa, ya Jesús te acogerá con más amor que nunca y con la creencia que tengas. Él solo es amor. Eso es lo que cuenta.
ResponderEliminarBajo mi punto de vista la espiritualidad no está reñida con la religión, mas bien todo lo contrario: es una forma de acceder a ella. Si te das cuenta el termino proviene de la palabra "re-ligar" esto es, volver a unir algo que se encuentra separado. En el Cristianismo, volver a unirnos a Dios por medio y en el seguimiento de su Hijo, Jesucristo.
ResponderEliminarEsto marca una diferencia porque implica a todo el ser, interior y exterior. El que siga únicamente ritos externos en base a convencionalismos sociales o lo que sea, está perdiendo su precioso tiempo porque no se está enterando absolutamente de nada. Se estará siguiendo a si mismo o a su propia idea de lo que es seguir a Cristo, pero no le está siguiendo a Él.
¿Se puede ser espiritual sin ser cristiano? Si
¿Se puede ser cristiano sin ser espiritual? No
Es así de simple.
Y la muestra de ello es el origen real del movimiento cristiano. No se trata de seguir unas reglas, o hacer esto o aquello. De hecho, el origen no viene de uno mismo. Es un encuentro con Jesús Resucitado, el encuentro con una persona real que está viva. Este es el quid. Se puede compartir o no, pero esto es el cristianismo y decir que es otra cosa es pervertirlo.
Ssobre lo que comnetas del cura, si, es cierto, en la Iglesia hay sacerdotes de los de darle de comer aparte... En mi vida he conocido a muchos y algunos seguro que mucho peores que el que tu cuentas. Pero creo q es un error identificar a la persona concreta con el Ministerio, de la misma forma que no dejas de creer en el matrimonio porque conoces a una pareja que se separó, o dejas de ir al médico porque te encontraste con uno en un dia borde.
¿No estás juzgando muy duramente a un colectivo por algo que ha hecho una persona? Me parece que sí
A lo dicho por Ramón añadir que aqui nadie se salva, nadie puede decir "yo soy bueno y los demas escoria" ni ese sacerdote ni nadie te lo puede decir. Todos estamos en el mismo barco: el de ser mejores cada día. La verdad es que criticar las cosas que dice la Iglesia es fácil, el problema es que son pocos los qué preguntan por qué dice eso... y buscan una respuesta.
Saludos (y disculpa por la enciclopedia que te acabo de escribir :-)
¡Gracias por los interesantes comentarios y puntos de vista expresados!
ResponderEliminarHe estado terminando un par de cosillas antes de las vacaciones y por eso he estado un poco "desconectada"
Ramón, no iría tan lejos etiquetando al cura del Pilar de hereje. Simplemente actua según sus creencias y las enseñanzas recibidas, trabaja desde una estructura poco flexible y su edad (que era bastante avanzada) junto con sus vivencias personales no le permiten verlo de otro modo. Creo que actuo de buena fe con la intención de que sus palabras me hicieran recapacitar y "retornar" al "buen camino". De verdad lo creo así. No me dijo las cosas que me dijo con maldad o con intención de herirme. Más bien lo hizo para advertirme de mi desvío en cuanto a las enseñanzas de la Iglesia.
Es cierto que si que logró abrirme los ojos, fué como si me quitaran una venda, pero no de los ojos, sino de la conciencia y a la vez se me quitó un gran peso de encima.
Efrén: Me alegra mucho que compartas tu punto de vista. Comparto contigo lo de que "aquí nadie se salva", creo que intentamos hacer las cosas del mejor modo posible.
En cuanto a lo que comentas de si se puede ser cristiano sin ser espiritual también estoy de acuerdo, lo que ocurre es que quizá todavía hay muchas personas que se definen como cristianos no han profundizado en la implicación de lo que significa serlo y se limitan a "hacer que lo son" en determinados momentos de su vida. Por ejemplo cuando van a misa.
¿Porque digo eso de "hacer que lo son"? Bueno, yo no voy nada más que en contadas ocasiones a misa, es decir, actos sociales. Pero cuando voy, a pesar de ser como "acto social", entro con el respeto que merece un lugar de culto y también muestro ese respeto al sacerdote, escuchando con conciencia sus palabras y recapacitando sobre ellas, llevandome lo que me vale (que siempre hay algo) y dándome cuenta de lo que no estoy deacuerdo. Sin embargo a mi alrededor observo que la inmensa mayoría cuentan chismes entre si, no escuchan, se ríen del sacerdote y sus palabras y solo se fijan en los demás para criticarles. Y bueno, lo peor es que de esos muchos se definen como cristianos y lo hacen por costumbre, porque así les han dicho desde pequeños. Como a mi.
Lo siento se me ha cortado (he dado a la tecla que no debía :-P
ResponderEliminarSigo mi respuesta, Efren.
Me apena este tipo de actuación, aunque se que no lo hacen con esa intención, simplemente no se dan cuenta de que lo hacen. Si este comentario y post sirve para que alguien abra los ojos como yo sobre su forma de actuar y abra su conciencia habra merecido la pena.
Y también te doy la razón en que fui dura al juzgar a todo el Ministerio por una persona. Al leer tus palabras me he dado cuenta de que me lo había tomado personalmente y no había analizado la posible intención del sacerdote, ni tampoco tenia suficiente conciencia sobre lo positivo que esas palabras habían sido para mi. Además conozco a sacerdotes que de verdad se remangan para trabajar junto a la comunidad donde sirven, así que rompo una lanza también por ellos.
Me encantará seguir leyendo vuestras aportaciones.
¡Un abrazo a los dos!